
Se ve como un cachorro normal, pero cuando se desespera y enoja, se convierte en una bola de ternura.
Nunca vimos un perro como éste. Parece como si se hubiera tragado un alto parlante muy sofisticado y casi pudiera hablar. Nadie se hubiera imaginado que era capaz de algo así.
Sorprende a tus amigos con este pequeño, el cuál pondrá a cualquiera de buen humor.